13 octubre, 1870
Se siente inmerso en una profunda oscuridad. Necesita luz. Se pregunta dónde encontrarla. La respuesta le aflora con rapidez: en la Iglesia. Luego se sumerge en una interesante reflexión: Dios…nos ha revelado los acontecimientos que afectan a la Iglesia y a la sociedad humana. Tanto que ninguna catástrofe la cogerá por sorpresa -manifiesta convencido-. Por sus profetas nos ha actualizado el porvenir. En consecuencia, consultémoslos.