Sta. Cruz. Gran batalla. Victoria.
El entorno que envuelve a Palau es adverso. Es él quien nos confiesa su propia situación: Miraba a un espíritu malo que hacía más de veinte años me atormentaba. La presencia de la Amada le conforta. Viene en son de lucha. Se entabla la batalla. Es recia pero confía en la victoria final. Agradecido, renueva su consagración: Tal cual soy, me doy a ti.. Si no te doy más es porque no tengo.