22, febrero 1872
Como buen narrador describe, la dramática situación que vive la ciudad de Calasanz y su entorno. Allí, las hijas de Palau atienden, con profesionalidad y mimo a los apestados. ¡Poco pensaba él que por solidarizarse con ellos contraería la enfermedad que acabaría con su vida!. El tifus fue la consecuencia de un contexto calamitoso, precedido por años de malas cosechas y hambruna.