La noche del 8 de diciembre, 1866 en Roma.
Comunicado a Pío IX.
Palau ha presentado, al Papa, su proyecto sobre el exorcistado y se encuentra a la espera de respuesta. Como Jacob, luchó con el ángel. Él es quien recoge su firme propuesta: ¡O borra de mi frente el nombre de Dios.. y con él borra de mi alma el carácter sacerdotal.. o no permitas que la autoridad de Dios, en los prelados, se vea ultrajada por el maligno!.