29 Diciembre, 1870
El semanario comenta un infundio. El P. Palau es un estafador, farsante.. y otras lindezas. Bajo capa de exorcismos ejerce la medicina, acoge, en su casa a gente de mala vida. Las autoridades inspeccionan su domicilio. Lo encarcelan. Sin embargo, las familias de los enfermos valoran el evento de forma opuesta: Sólo el P. Palau los ha socorrido. La radiografía que de él han hecho sus adversarios es netamente evangélica.